La
palta se divide en tres "razas": Mexicana,
Guatemalteca y Antillana.
Estas
tres razas de palta, desde la antigüedad se fueron mezclando naturalmente entre
ellas por medio de su propio sistema de reproducción. El resultado de estas
fusiones; producidas por medio de "polinización cruzada"; dieron
origen a incontables variedades, híbridas naturales indefinidas. Recién a
partir de principios del siglo pasado (1900) se comenzaron a seleccionar paltos
de excelentes atributos para ganar mercados consumidores, dando origen a los
distintos cultivares que durante décadas lideraron los mercados mundiales.
Todas estas nuevas variedades funcionaron bien hasta que en el año 1935 se patentó en Estados Unidos una
nueva variedad llamada 'Hass', de progenitores desconocidos (pero
con más porcentaje de Guatemalteca), originado
en La Habra, un
lugar de California, donde el Sr. Rudolph
Gay Hass la
detectó entre los árboles de su huerto.